Hoy les presentamos a Anabel, una de las djs invitadas de la próxima FREE RAVE que llevamos a cabo en Ache Paraje este sábado 5 de abril a las 21hs.
BIOGRAFÍA
Anabel es una DJ radicada en Buenos Aires, que selecciona música para escuchar con el cuerpo.
Su identidad sonora nace de una fuerte conexión con el house, que con el tiempo se fue transformando para incorporar texturas del Breakbeat, Electro, Italo, Techno y EBM. Con una mayor exploración de las luces que de las sombras, sus sets irradian una energía atemporal, combinando influencias de los 80s y principios de los 2000 con producciones contemporáneas. Aspira a generar momentos eclécticos en la pista de baile, con una atmósfera cambiante que no se mantiene estática en un solo género y que provoca entregarse al movimiento.
También forma parte de GNC Records, un sello influenciado por la búsqueda sonora del New Beat, EBM, Acid House, Electro, Hardcore y Proto Trance, con producciones pensadas para encender la pista. En su primer año, GNC ha editado 2 EPs en vinilo y 1 EP en formato digital, con la idea de promover música que resiste a las fórmulas más convencionales.
Si tuvieras que describir tu personalidad con 3 tracks, ¿Cuáles serían?
Dance Boy Dance – Alexander Robotnick
¿Cuánto influyeron los grupos humanos con los que te rodeaste hasta llegar a donde estás hoy en día?
Un montón. Arranque a tocar no sólo por una fuerte conexión con la música, sino que también por compartir un grupo de amigxs con personas muy hermosas y talentosas, que tocan live y producen, y que me inspiraron y motivaron a probar que onda, de manera lúdica y sin pretensiones de nada. En un contexto de cuarentena, en el que los clubes todavía estaban cerrados, nos juntábamos en casas a jamear y tocar, y pasaban cosas muy divertidas. Era algo íntimo y muy único, espacios de encuentro que empezaron a ser habitados cada vez por más personas que estaban en la misma, y que tenían mucha energía para escuchar y bailar lo que queríamos compartir. Así que mi proceso de aprendizaje como DJ fue desde el principio colectivo, compartido con gente.
También pensando en esta pregunta, se me vino a la cabeza una palabra que elabora Brian Eno “scenius” que combina la idea de “escena” y “genio” para explicar que la creatividad siempre es el resultado de una mente conectada con otras mentes, de una colaboración, que uno no hace y crea desde la nada de manera individual, sino que siempre estamos atravesados por las referencias que nos gustan y los espacios que habitamos. Y a mi me gusta pensarlo y vivirlo de esa manera. Queriendo ser parte de algo que siento que me trasciende, que es con otrxs y que va más allá de mi.

¿Tu pasión por la música la ves de la mano de alguna otra disciplina?
Dentro de las cosas que hice/hago y me gustan, la veo conectada con la danza contemporánea, con el yoga, con la poesía, incluso con la filosofía y otros tipos de arte. Creo que me apasionan varias cosas que me permiten ir más allá de mis pensamientos y de mi cabeza, poner la atención en mi cuerpo y poder conectar con algo más emotivo y sensible, con formas de expresión que se quedan muy cortas con la palabra. La música te permite habitar otro lenguaje y entrar en un estado meditativo y de trance, que lo veo muy similar al que uno entra cuando crea otras cosas.
¿Hubo algún código de la escena de la música electrónica que tuviste que aprender por las malas?
Que las redes sociales y la exposición digital ya son parte de la escena también. Veo que hay algunos casos en los que se le da demasiada importancia a cómo se va a registrar y mostrar algo en plataformas, o a que el track explote y parezca increíble para al reel, y que se descuidan el contenido y la experiencia colectiva de las personas que están en la fiesta. Es algo que me molestaba un montón y que me ponía muy anti y hater, pero desde esa actitud me di cuenta que no construyo nada y que tampoco puedo hacer mucho para cambiarlo. Creo que lo fui aceptando, dándole cada vez menos importancia e intentando ver de qué manera se pueden usar las herramientas digitales para llegar a otras personas, desde una búsqueda que sea más real y genuina, y no tan superficial y marketinera. Porque después de todo vivimos en un mundo que está atravesado por las pantallas y las construcciones digitales, entonces tampoco tiene sentido querer expulsarlo de la pista de baile, porque no se puede.
¿Cuál crees que es el mayor estrés al que se puede llegar a enfrentar un dj durante un evento en vivo?
Su cabeza, mambearse y no poder resolver. Porque en definitiva en una cabina te puede pasar de todo, te pueden fallar los equipos, podes tener desencuentros con la gente de producción, no conectar con el espacio, y otras cosas que no podes prevenir. A veces ni siquiera pasan tantas cosas en el afuera y es más una lucha interna por enroscarte y no poder conectar con lo que estás haciendo en el momento. Más allá de lo que pase, uno tiene que poder sacarlo adelante.
¿Hay algún sello discográfico que haya sido una revelación?
Creo que cuando arranque a diggear mi mayor revelación fue Klasse Wrecks, por la cantidad de influencias que tienen y la variedad de sonidos. Además construyeron su propio universo visual, que va más allá de la música y los discos, con una curaduría espectacular y manteniendo una actitud super underground, sin preocuparse tanto por las tendencias ni las ventas.

Contanos un poco sobre el origen de tu sello GNC.
GNC nació a partir de una idea de Iván, que pensó en Menta y en mí como un buen team para laburar en conjunto y armar un concepto. Arrancamos con un EP de Iván, que nos gustaba mucho y lo publicamos en Bandcamp, pensándolo como un experimento para ir aprendiendo cómo se maneja un sello. Quedamos flasheados con la cantidad de gente que lo escuchó y la buena recepción que tuvo, y como parte de esto, también nos llegó una propuesta de una distribuidora para prensar nuestros lanzamientos en vinilo y distribuirlos en Europa.
¿Cómo se dividen los roles?
En cuanto a nuestros roles, Iván hace que las cosas sucedan, es una persona con mucha energía que le apasionan los sellos y se ocupa del funcionamiento más operativo, de la relación con los artistas y con las personas que trabajamos, de ir puliendo lo que hacemos y pensar nuevas propuestas.
Menta lleva a cabo nuestro podcast (Transmisión Mecánica), recibe y testea los vinilos para que lleguen a salvo a Buenos Aires, los reparte entre colegas y también nos propone nuevos artistas. Tiene alma de digger y se mueve en circuitos de gente muy apasionada por la música, nos aporta perspectiva e ideas frescas que nos ayudan a ampliar el universo sonoro del sello y nuestra red.
Yo me encargo de la dirección de arte, de pensar cómo construimos nuestra identidad y universo, y cómo nuestra curaduría musical se traduce a lo visual. Para los artes de tapa me gusta trabajar conceptos/historias con los artistas y después las llevamos a cabo con los diseñadores gráficos con los que trabajamos, que la rompen. Busco que haya una integración entre nuestros releases, que funcionen como partes de un todo que está en pleno desarrollo.
¿Qué rol ocupan hoy en día los sellos discográficos independientes?
Creo que cumplen el rol de promover artistas, un sonido, una curaduría y una visión, y también de aportar algo a la escena, para que llegue a una comunidad y pueda expandirse sin tantos intermediarios. Mantienen viva la esencia underground, esa esencia de la que emergieron el house y el techno históricamente y que de a momentos nos da la sensación de que se pierde entre tantas propuestas con foco en el negocio y en lo mainstream.
¿A qué te remite la palabra rave? ¿ Esa percepción influirá de alguna manera tu selecta de este sábado en la fiesta FREE RAVE?
La palabra RAVE me remite a una fiesta sin condicionamientos, más lúdica y energética, en donde uno va preparado para escuchar de todo y agitar la pista, con más libertad y sin tantas pretensiones. Para este sábado voy preparada para fluir con la gente, con tracks luminosos y divertidos que empiezan a subir la intensidad.